12 de febrero de 2010

No sé muy bien lo que voy a acabar escribiendo en este post. Quiero decir, que tengo varias ideas rondando por mi cabeza y no sé como plasmarlas, o más bien no sé como saldrán a la superficie. Supongo que si quisiera resumir lo que intento explicar podría hacerlo con una sola frase, algo así como, pero ¿por qué coño no cuidamos a los que tenemos a nuestro lado?

Me ha llevado a esta reflexión algo que viví ayer. Me fuí a Madrid a visitar a una amiga. No puedo contar nada más porque pertenece a su intimidad, pero volví a casa echa polvo. No sabía como ayudarla y eso me cabreó. Somos nosotros mismos y no otros, los que nos convertimos en ratón, contruímos nuestro laberinto con nuestras propias manos, y le dotamos aparentemente de una sola salida.

No es cuestión de buscar culpables, nadie tiene la culpa, quizás el egoísmo de la gente, que acaba teniendo vida propia. El no ceder, el puto ombliguismo llevado al infinito por todas y cada una de las partes. Llegué a casa con esa sola pregunta en la cabeza dando vueltas, y disparándose desde uno de mis muros hasta el otro situado justo enfrente, como si fuera una pelota de ese juego ruidoso y estúpido, donde tienes que evitar a toda costa que se te cuele entre las manos y solo tienes ayuda de dos mandos cortitos para lanzarla de nuevo fuerte hasta el otro lado, porque sino pierdes, no se sabe muy bien el qué, pero pierdes y todo se ilumina y no hay nada que hacer...

Nos quejamos todo el puto día: No me llaman. Yo por ahí no paso. Hay que ver como está el mundo, vaya mierda, que asco. Pues yo no cedo. Que asco, que asco, que asco...

¿Y, sabéis? puede que sea cierto que todo sea una mierda, pero es nuestra mierda. Y por otro lado ¿hacemos algo para evitarlo? y no es un puta pregunta bucólica retórica. Realmente podríamos hacer algo si nos diera la gana, algo aparentemente pequeño. Mirar una semilla y aprender. Los pensamientos tiene fuerza y si empiezas aunque solo sea por cuidar del que tienes al lado, y esa persona hace lo mismo y otra y otra más...al final pasará algo. Creo que en las cosas pequeñas residen en realidad las grandes y que las grandes sólo crecen porque son suma, y ya sé que ahora mismo sueno a Bucay y mira que le tengo tirria, pero es que me he levantado un poco así con ganas de tirar del cable de la puta máquina de pinball y dejarlo todo a oscuras y salir por la puerta...

Y me parece que es lo que voy a hacer...porque además hace sol, y yo, ya puedo andar después de una semana con la pata chula. Os dejo una cancioncilla que no sé, siempre me ha gustado mucho...

Y así dejo ejem...que se siga poniendo cursi (realista) otro...






Besos

9 comentarios:

Zentolo dijo...

Lo fácil sería empezar a decir todos esos típicos tópicos de "hay que luchar", "tira pa'lante", bla, bla, bla...
Dice Macaco en la cancíon que las cosas grandes empiezan en las pequeñas (una gota junto a otra hace oleajes, luego mares... océanos). Si todos arrimáramos el hombro...
Pero para no ponernos metafísicos, remato este mini alegato merdallento con un me alegra mucho saber que ya estás mejor de la pata chula...
Besitos

Petri dijo...

Si escribes esto es porque no te miras el ombligo, ¿No te parece?.
Un beso niña del corazón de plumas.

Anónimo dijo...

Me alegro que ya estés mejor.
El mundo es una mierda!? pero, hacemos algo? no,esperamos que sean los demás los que empiecen.
Los pequeños gestos hacen mucho.
Besos

Gabiprog dijo...

Tenemos tendencias malsanas a no levantar la vista, a no ver ni los detalles ni los horizontes, y en que en este sendero no vamos precisamente solos.

http://reflejosysusurros.blogspot.com/2010/01/credo.html

Sara Royo dijo...

Pues sí. Con sólo hacerle un poco más de caso a la gente cercana, sería bastante. Pero nada, q no hay manera.
Besicos.

Fiebre dijo...

Te ha quedado un post redondo.

Aquí estoy yo hoy rumiando una cosilla en mi mismidad,(como hago siempre que ando algo jodida)y tienes razón.
Y mira que soy de las que predico lo de dejar de mirarse el ombligo, pero a veces caemos en esa tentación.

¿Sabes lo que te digo? Que me voy a dar el fin de semana de tregua y el lunes me pongo en marcha.

Algunas cosas tienen que cambiar en mi vida. Voy a empezar a mirar más a mi alrededor.

Nebroa dijo...

He aprendido algunas cosas ultimamente, como lecciones que no por repetidas se colaron en mi alma, pero ultimamente, quizá por repetición, han empezado a quedarse conmigo. No mirarme el ombligo tan a menudo y cuidar de los que me rodean. Disfrutarlos. Comprenderlos. Serles, alguna vez, un poco útil. Y sabes? muchas veces respiro así fuerte y vaya! me siento llena!
Mua

Drei dijo...

No son malos los dias "jorgebucay", sirven para valorar mas los tipo "maitena", jajaja

No te agobies a la gente le gusta crearse problemas y amargarse la vida sin sentido. No me incluyo, yo soy muuy practica sufrir por todo a lo bestia, si es que soy una sentimental.

Y una cosa, no se puede ayudara quien no quiere o no se deja, y a veces nos empeñamos mucho con esto.

Estoy de los nervios mañana inaguro mi hijo economico.

Besitos guapa.

Cesc dijo...

Escribas lo que escribas, te leeremos.