Ha sido justo hoy, un sólo instante,
pequeño.
Esa niebla dentro,
la he notado,
en los huesos,
en los músculos,
en mi sonrisa,
congelada.
Lo he visto, claramente: que mientras yo, hasta hoy, creía que, todavía me estaba comiendo a la vida, la vida me había tragado por completo con sus fauces.
Cercanías
-
Es mejor no despegarse demasiado de aquello que se quiere. La proximidad
constante con lo amado nos recuerda el valor de lo que poseemos y nos
enseña a cu...
Hace 4 horas
3 comentarios:
Gata,
Tan pocas palabras encierran tanto...
Besos
S.
Yo también pensaba que me comía la vida. Ha de ser un sino...
que gran verdad....enhorabuena...
Publicar un comentario